Algunas veces te imagino y pienso en mi boca y tu calor.
Algunas veces intento borrar de mi memoria tu traición.
Algunas veces mi cabecita queda con nuestros recuerdos
a las cinco en el salón.
Algunas veces te veo y te beso en mi imaginación,
y todas las noches me quedo dormida
empapando mi almohada por mis recuerdos y tu olor.
Algunas veces recuerdo que vivo a plazos por sobrevivir,
algunas veces pienso que necesito un final feliz.
Aún todavia se recogen las cenizas de este pobre corazón...
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